Todo el mundo sabe que el Everest es oficialmente la montaña más alta del mundo con sus 8.843 metros. Pero, ¿cómo se define el “punto cero” utilizado? ¿Es confiable?
La altitud de una montaña se define en relación con el nivel del mar, para ello, cada país define uno o varios puntos de referencia donde se instalan flotadores conectados a un dispositivo que registra los movimientos verticales generados por las variaciones del nivel del mar. España, por ejemplo, el punto de referencia se encuentra en zaguán (Alicante). La altitud cero corresponde al nivel medio del mar medido entre 1885 y 1897. Este largo período permite en principio superar los efectos del oleaje y la marea.
A escala mundial, todas estas referencias ya no tienen sentido. El punto cero se define entonces como si el océano estuviera perfectamente inmóvil (sin olas ni corrientes). Modelamos una tierra ficticia llamada geoide donde cada punto es perpendicular al campo de gravedad en una ubicación determinada. Siendo variable debido a la distribución desigual de masas en la Tierra, el geoide cambia de forma. Así se pueden observar diferencias de altitud de hasta 100 metros entre el geoide y el elipsoide, la forma “teórica” de la Tierra trazada según su radio.
