¿La cerveza sin alcohol es realmente sin alcohol?

Un 14% de la cerveza que se consume en España es cerveza sin alcohol. Somos el país líder en Europa tanto en su elaboración como en su consumo. ¿Sabemos realmente lo que consumimos?¿Cuál es la diferencia en la producción de la cerveza con alcohol y sin alcohol? En esta publicación intentaremos responder a todas las preguntas que se le pueden ocurrir a cualquier persona en el día a día.

¿Cómo se produce?

Hemos contactado con Germán Melgarejo, Maestro cervecero de Cervezas Moritz. Nos ha contado todo el procedimiento de la cerveza sin alcohol y sus curiosidades.

El proceso de destilación consiste en calentar la cerveza a suficiente temperatura para que el alcohol (Etanol), que tiene una temperatura de ebullición más baja que el agua (78,37ºC), se evapore. No sucede lo mismo con el agua, que tiene una temperatura de ebullición superior (100ºC) y que por lo tanto queda en la caldera. El alcohol evaporado se vuelve a condensar por lo que se recupera para otros usos, y la cerveza queda, por lo tanto, con un nivel muy bajo de alcohol (0,03% aprox.)

Por eso siempre se habla de 0,0%, porque el alcohol es inferior a esta cifra, pero nunca será inexistente, según nos informa Germán. La producción de la cerveza sin alcohol tiene un proceso añadido, por lo que cuesta más producirla.

¿Por qué no gusta tanto como la cerveza con alcohol?

Muchos se preguntarán por qué a la gente no le suelen gustar estas cervezas. Pues resulta que al llevar la cerveza a altas temperaturas, se pierden muchos componentes aromáticos del producto y, por lo tanto, se pierde mucha intensidad de sabor y gusto. Para recuperarlos y que la cerveza recuerde lo máximo posible a su vecina con alcohol, se le añaden extractos aromáticos naturales, lo que puede dar una sensación de artificialidad al producto. También el alcohol aporta cuerpo y calentura a la cerveza, que se suele intentar reproducir añadiendo azúcar.